El aeropuerto Ernesto Cortissoz de Barranquilla trabaja con un equipo interdisciplinario, que vela por la salud de los colaboradores y aseguran el cumplimiento efectivo de las medidas de protección, para cumplir efectivamente con cada una de las directrices exigidas por el Gobierno y la ANI, tras la decisión de permitir la recuperación gradual de vida productiva en el país.

Esto  ha implicado a los diferentes sectores autorizados asumir con responsabilidad los cambios en la manera de desarrollar las labores, en el comportamiento y relacionamiento de sus colaboradores, además de cumplir con la exigencia de medidas de protección e invertir en los elementos necesarios para garantizar el bienestar de todos.

Para Yeisy Niebles, líder de Seguridad y Salud en el Trabajo del Grupo Aeroportuario del Caribe, Concesionaria del aeropuerto Ernesto Cortissoz; la implementación adecuada de los protocolos de bioseguridad ha significado una inversión de recursos técnicos y tecnológicos, pero también en materia de comunicación

La funcionaria reconoce que adoptar los protocolos no ha sido fácil, pero son necesarios para el reinicio de las obras y para, gradualmente, recobrar la normalidad. “Tenemos que entender que el lavado de manos, el distanciamiento social, la desinfección de herramientas de trabajo y el porte de los elementos de protección personal, entre otras medidas, más que una obligación son una responsabilidad con nosotros mismos y con los demás”, puntualiza.para generar conciencia y hábitos. 

La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) cuenta con el acompañamiento de la Administradora de Riegos Laborales (ARL) de cada concesionario y el aval de la interventoría y del municipio, siempre cumpliendo los parámetros de prevención de Gobierno nacional. Es así como, a la fecha, la Entidad ha aprobado 44 planes de reactivación de obras, que han debido presentar los respectivos protocolos de bioseguridad para reiniciar labores, lo que ha representado hasta el momento la activación de 35.460 empleos.
 
Para el caso del reinicio de las obras civiles en el país, la prioridad es la formulación y puesta en marcha de los protocolos de bioseguridad, cuyo propósito fundamental es evitar la propagación y el contagio del Covid-19, para cuidar y proteger a los trabajadores, usuarios y a la población de las zonas aledañas a los proyectos de infraestructura concesionada.
 
Desde el pasado 8 de abril, cuando se expidió la circular 03, y las posteriores resoluciones conjuntas 666 y 679 de 2020, expedidas por los ministerios de Salud, Transporte y Trabajo, las concesionarias e interventorías han venido asumiendo responsablemente la tarea de desarrollar los protocolos y materializarlos en cada uno de los grandes proyectos, según su línea de trabajo.
 
Transformación organizacional
 
En el caso de Accenorte S.A.S, Concesionaria encargada del proyecto en la Autopista Norte de Bogotá, Carmen Álvarez, directora jurídica, señala que para el cumplimiento e implementación de los protocolos de bioseguridad se requirió el apoyo de más personal de salud y seguridad en el trabajo, quienes se encargan de impartir y supervisar que se cumplan todas las medidas en los diferentes frentes de trabajo, con el apoyo de los grupos social y ambiental del proyecto.
 
Carmen añade que el cumplimiento de los protocolos ha implicado inversiones en diferentes frentes y la contratación de personal adicional además un rediseño del funcionamiento de la organización. Por ejemplo, en vista de que el grupo de mensajería de la concesión no puede transitar, debido a la medida de aislamiento preventivo obligatorio, se capacitó a este equipo para apoyar las labores de desinfección de las instalaciones y equipos. 
 
Además, el personal del área administrativa hace teletrabajo, lo que ha requerido adecuar el sistema tecnológico y digitalizar gran parte de los procesos de la organización.
 
Por su parte, el ingeniero Manuel León, coordinador del Sistema de Gestión Integrado de Accenorte S.A.S, señala que uno de los momentos más importantes es cuando se evalúa el estado de salud del personal antes de iniciar sus labores. Para ello, la concesionaria dispuso de un sistema en línea en el que se carga la información diaria de salud de cada persona y que facilita identificar si ésta se encuentra en condiciones para empezar su jornada laboral o, por el contrario, enviarla a casa o a la zona de aislamiento que se estableció en la obra.
 
A la fecha, asegura León, solo se han reportado gripas y no se ha requerido usar el área de aislamiento, que cuenta con los espacios y elementos necesarios para brindar atención primaria en caso de detectar alguna persona con Covid 19 o sintomatología asociada a este virus. Además, se cuenta con profesionales y ambulancia medicalizada para brindar atención inmediata.
 
También se han dispuesto de baterías de baños adicionales para reducir el desplazamiento de los trabajadores a lo largo del corredor y facilitar el lavado de manos. Además, de los elementos de señalización y seguridad.